Por: Juan Pablo Pérez, Comunicador Social y Periodista
Todo parece indicar que estamos en los peores tiempos de la ortografía, por lo menos en lo referente a la lengua española, y solo basta dar una pasada por las redes sociales para observar la manera como escriben, especialmente, los jóvenes. Si bien es cierto que la inmediatez, a veces, hace que se pierda precisión en el mensaje, no se deben descuidar las normas establecidas por la RAE – real Academia de la Lengua Española –.
La sociedad es dinámica, de eso no cabe duda, mucho más ahora con la facilidad de la información que existe actualmente gracias a la Internet. Sin embargo, el nuevo registro comunicativo que se denomina como texting - se define como el abuso en el envío de mensajes de texto, ya sea por medio de teléfonos celulares o por redes sociales para mantenerse en contacto e informados –, lo cual ha derivado en el empobrecimiento de los idiomas en general, en este caso el español.
De hecho, un informe de la Universidad de Alcalá (UAH) alerta de que el 90 % de los jóvenes admite cometer faltas de ortografía cuando escribe en las plataformas sociales. No obstante, varios estudios demuestran que escribir con faltas en las redes sociales no afecta al nivel de ortografía. “Cuando las personas escriben en los medios digitales instantáneos, tales como WhatsApp, priorizan la rapidez y el contenido del mensaje por delante de la forma, haciendo uso de la escritura abreviada, sin acentos y con emoticonos”, explica la profesora de los Estudios de Artes y Humanidades de la UOC Ona Domènech al diario El País de España.
Aunque una vertiente de la academia avala este comportamiento, sí es evidente que la excesiva abreviación e anglicismos empleados por los internautas jóvenes aumentan considerablemente. Algunos ejemplos son palabras tales como WTF, XOXO, 4ever o LOL, las cuales abundan en los dispositivos móviles de millenials y centenials.
En definitiva, no hay un consenso entre los expertos de la lengua, pero sí parecen estar de acuerdo en algo, la baja lecturabilidad es el verdadero problema a la hora de empobrecer el idioma, así se utilicen nuevas abreviaciones por la inmediatez de la entrega de un mensaje.
“La clave aquí es la falta de lectura. Si un niño o joven lee, pues entonces, lógicamente, el nivel de su ortografía sube. En general, el porcentaje de niños que se meten en la lectura es muy bajito. Entonces, qué hacen los niños. No es que dejen de leer y estén en las redes sociales, es que ahora su tiempo de ocio lo sustituyen y se meten en las redes”, afirma la presidenta de la Asociación de Directores e Directivos de Institutos de Galicia, Isabel Ruso, a diario La Voz de Galicia.
En ese orden de ideas, es bueno que los internautas, en general, se desprendan un poco de la tecnología y retomen las tradicionales costumbres de coger un libro en físico y se sientan cómodos con esta práctica. Vale la pena resaltar que según el Instituto Cervantes, el 8,1 % de los usuarios de Internet se comunica en español haciendo que este idioma sea el tercero más empleado en el mundo después del Inglés y Mandarín. Un motivo más para cuidar nuestro idioma.
Ante esta nueva dinámica el ya conocido programa “Profesor Súper O”, transmitido por RTVC estrena una nueva temporada con errores idiomáticos en las redes sociales, con el fin de concientizar a las personas para que hagan un mejor uso del idioma español, y no caer en el refrán popular que dice: la mala ortografía es el mal aliento de la escritura.
